¿Qué conlleva ser docente?
Ser docente es una labor ardua en la que se requieren varias habilidades por parte de la persona que se dedica a esta labor. Su formación constante y dedicación sirve precisamente para conducir y enseñar, tal como lo marca el lema de nuestra amada Universidad Intercontinental: Ducit et docet.
Relación profesor-alumno
Suelen existir ocasiones en las que las circunstancias o la misma interacción entre profesor y alumno puede resultar un reto en momentos sociales como los que se viven en la sociedad actual.
Es importante recalcar que, como lo mencionan Froment, F., Bohórquez, R. y García, Alfonso (2019), “a lo largo de los últimos 30 años se han llevado a cabo numerosas investigaciones centradas en ilustrar la importancia de la comunicación profesor-alumno […] [las cuales] han demostrado principalmente que las percepciones de los estudiantes sobre los docentes están influenciadas en gran medida por la comunicación que mantienen entre ellos […] Por ello, una enseñanza eficaz requiere de la comunicación entre profesores y alumnos ya que dicha interacción es beneficiosa para ambos” (Frymier y Houser, 2000).
Dicho lo anterior, podemos aseverar que parte fundamental del ser docente es comunicarse efectivamente con el estudiante, de forma que logre integrar los conocimientos que va construyendo a su persona de manera íntegra y eficaz.
Tanto el docente, como el alumno han de permanecer en un constante ejercicio de respeto y de encuadre académico a fin de no tergiversar desde ningún punto los límites únicamente académicos que entrelazan su interacción escolar, en este caso, universitaria.
Las tres dimensiones
Froment, F. y cols (2019) mencionan que la interacción docente-alumno está compuesta por tres dimensiones:
1. Competencia.
2. Confianza.
3. Buena voluntad.
Por ello, mucho del trabajo actual del docente estará bajo observación en cuanto a su destreza académica, cercanía respetuosa y voluntad única de construir entornos pacíficos, neutros y enriquecedores para la construcción de criterios analizantes y propositivos.
Este preludio sirve para entrar en el tema del respeto mutuo, que ha de mantenerse en el entorno académico, pues en algunos momentos se suele dejar caer la responsabilidad total del proceso en el docente, liberando de su correspondiente parte responsiva al alumno, quien ha de esforzarse por entrar radicalmente en un ambiente académico formativo, arduo y constante.
Habrá de ubicar con perspectiva su papel formativo, que en ocasiones tendrá que ser formal y totalmente enfocado. Esto ha de tomarse como un papel necesario que ha de ser encabezado, en ocasiones, por los docentes y directivos a modo de comprensión empírica y práctica en el proceso de aprendizaje por parte de los alumnos.
Conclusión
El alumno ha de tener en mente que, al entrar a un entorno universitario, encontrará formas variadas y personalidades distintas al interactuar en las aulas que ha de recorrer; empero, su objetivo no será revisar con lupa las formas, sino forjar de ellas las mejores herramientas que le permitan salir al mundo laboral para hacer frente de forma teórica y con algo de práctica a los retos profesionales que han decidido ejercer dentro de su campo de conocimiento electo.
Por una docencia humana y un estudiantado autoanalizante. Recuerda que en la Universidad Intercontinental puedes estudiar la Licenciatura de Pedagogía e Innovación Educativa
Referencias
Froment, Facundo, y Bohórquez, Rocío y Javier, Alfonso (2019). Credibilidad docente: una revisión de la literatura. Teoría de la Educación. Revista Interuniversitaria. 32. 10.14201/teri.20313.
Para saber más
Si quieres saber más sobre la relación profesor-alumno , consulta https://entreeducadores.com/2009/08/01/la-relacion-profesor-alumno-en-el-aula/